La mujer que rescata niñas de la violencia sexual en los barrios de Cartagena

hace 2 meses 8

Las niñas de Talitha Qum se pararon valientes y talentosas en la tarima de la Plaza de los Coches, en el Centro Histórico de Cartagena, el pasado viernes primero de marzo.

Llevaron con talento y destreza su mensaje contra la violencia sexual que sufren las niñas de Cartagena. Con teatro, danza y canto se expresaron frente al alcalde, comitiva eclesiástica, otras autoridades, padres de familia y turistas que pasaron por el monumento.

(Además: Estudiantes salen a paro porque desde el año pasado esperan designación de docente)

Celebraban con orgullo los 10 años Talitha Qum. La obra social que abraza con amor, capacita y empodera a niñas entre los 8 y los 17 años.

A través de la dramaturgia narraron el dolor de la explotación sexual, pero también las herramientas para enfrentarla.

El origen y el amor a los más necesitados

Talitha Qum

Talitha Qum, la madre blanca López y las niñas de los barrios San Francisco, Candelaria y la María, de Cartagena

En Arameo, Talitha Qum traduce: ‘A ti te digo niña, levántate’.

La frase retrata una escena del Evangelio, Marcos 541, cuando Jesús extiende la mano y le dice a una niña 12 años a punto de morir: “Talitha Qum”. La niña se levanta de un sueño profundo.

Esta imagen poética y de fe, es el punto de partida, la inspiración, con la cual la madre Blanca Nubia López inició hace 10 años la mayor obra social que rescata a niñas de la explotación sexual y la trata de personas, en el mal llamado cinturón de pobreza histórica de Cartagena de Indias: entre las faldas del Cerro de la Popa y la Ciénaga de la Virgen.

Blanca Nubia López y su foto con el Papa Francisco

Blanca Nubia López y su foto con el Papa Francisco

Foto:

John Montaño/ EL TIEMPO

La madre Blanca Nubia, retirada de la comunidad religiosa del Buen Pastor, recorre los barrios de San Francisco, La María, Candelaria y las goteras del Cerro de la Popa en busca de niñas entre los 8 y los 17 años para protegerlas, llenarlas de amor, capacitarlas, devolverles su autoestima, empoderarlas sobre sus derechos y fortalecerlas en la lucha contra la violencia sexual en estas barriadas miserables de Cartagena, ubicadas a 20 minutos del glamuroso Centro Histórico, y que son el retrato de la inequidad, en una de las ciudades más desiguales de Colombia.

“A mí se me encharcan los ojos cuando hablo de esto: llegar a estas periferias y encontrar la situación en la que viven niñas, niños y adolescentes, familias enteras, es muy duro: No tienen una gota de agua, la tienen que comprar, caso concreto en las faldas del Cerro de la Popa. Encontrar esas casitas donde hay una cama para 3, 4, o 5 personas. Donde las ollas las encuentras vacías, donde los niños están en la calle corriendo todo tipo de riesgos”, narra la madre Blanca Nubia, quien el pasado viernes  celebró los 10 años de Talitha Qum, en donde sus niñas, como lo han hecho a lo largo de esta década, llevaron su mensaje con su último musical: una pegajosa canción a ritmo de reguetón con una enseñanza clara y contundente conta el abuso sexual: ‘No lo permito’.

Este poderoso programa hoy empodera a 100 niñas y a sus familias contra este flagelo, en esta zona olvidada.

Blanca Nubia fue la primera persona que le reveló al mundo la tragedia y el dolor que viven los niños en los extramuros de la Ciudad Colonial: Fue esta religiosa radical quien le contó al mundo que en esos barrios de la periferia muchas madres venden la virginidad de sus niñas. Fue ella quien le relató al planeta que más allá de la primera ciudad turística del país, pasando ese corralito de piedra que sale en los catálogos internacionales de turismo, los propios padres violan a sus niñas.

“Hay situaciones muy duras. En algún momento rescaté, no una niña de Talitha, sino  una adolescente que era abusada sexualmente por el compañero sentimental de su tía, y la mujer lo permitía. Fue muy duro, hasta llevármela para mi casa y brindarle protección inmediata, mientras la acompañaba a hacer todas las denuncias. Terminé cargando todo ese dolor sobre mis hombros. No es la primera, ni la segunda vez, son situaciones muy duras todo el tiempo que solamente a los pies de Jesús puede uno desahogar todo el peso y el dolor de estas niñas”, dice.

En su lucha contra la violencia sexual, la trata de personas y por la protección de sus niñas, Blanca Nubia ha sido amenazada en dos ocasiones. Como ella lo dice, su lucha es radical y en muchas oportunidades ha elevado demandas penales contra padres de familia, pedófilos y proxenetas. Ella no teme por su vida: “el que se mete de redentor muere crucificado”, responde.

“El dolor que produce en el alma encontrar casos de padres que son capaces de vender a sus propios hijos a pedófilos, o encontrar que el abusador de una niña es el propio padre, o que el padrastro o un tío abusa de una menor con la complicidad de la madre, eso es muy duro, y eso está pasando acá en Cartagena, una ciudad que, además, por su condición turística hace más vulnerables a nuestras niñas frente a la violencia sexual”, denuncia.

La historia de una religiosa rebelde

Talitha Qum, madre Blanca Nubia y Monseñor Jorge Jiménez

Talitha Qum, madre Blanca Nubia y Monseñor Jorge Jiménez

Talitha Qum tiene sus raíces en la obra de Santa María Eufrasia, fundadora de la congregación de Nuestra Señora de la Caridad del Buen Pastor en el año 1835.

Antes de fundar Talitha Qum, la madre Blanca Nubia pertenecía a La Congregación del Buen Pastor que la había enviado a Cartagena conociendo su entrega a los más necesitados.

(Le puede interesar: Las labores aéreas que agilizaron construcción de escuela para indígenas en la Sierra)

“En el año 2013 nos piden que cerremos todas las obras de niñas y adolescentes en Colombia. Pero conociendo la situación extrema que sufren los niños y niñas acá, me negué a cerrar los programas sociales para Cartagena, eso implicó para mí muchos problemas, hasta retirarme de mi congregación”, cuenta esta mujer valiente, de 60 años, nominada al Premio Mujer Cafam 2024, por esta tarea para defender a estas pequeñas.

Talitha Qum, madre Blanca Nubia y Monseñor Jorge Jiménez

Talitha Qum, madre Blanca Nubia

“¿Cómo iba a dejar cerrar una obra por falta de personal y de recursos- que era lo que argumentaban mis superiores- en una ciudad cómo Cartagena? Acá el abuso, la explotación sexual comercial y la trata de personas es latente por todos los lugares. Sobre todo por ser una ciudad a donde llegan turistas con fines de explotación y trata. ¿Cómo iba a dejar que estas obras se cerraran? Así que renuncié a la congregación y me la jugué por las niñas de Cartagena”, relató.

Entones esta rebelde con causa, alquiló una habitación y se fue a vivir sola al barrio San Francisco.

“Pensaba todas las noches en la obra de Santa María Eufrasia. Ella esperaba los barcos en la isla de Noirmoutier, en Francia, cuando llegaban cargados de niñas traídas de África que eran vendían como esclavas. Ella las esperaba en la isla para comprarlas y entregárselas a familias que las cuidaran y las protegieran”, cuenta Blanca.

Talitha Qum

Pero Blanca Nubia no estaba sola. La Arquidiócesis de Cartagena conoció lo que estaba haciendo esta mujer empecinada y rebelde en una de las zonas más violentas de Cartagena, y le tendió la mano.

“En el 2013 empiezo a visitar las periferias, los barrios más difíciles, pero fue el 28 de febrero del 2014, que tuve un pequeño espacio en la casa cural del barrio San Francisco y allí recibí, en horas de la tarde, a las primeras niñas de Talitha Qum”, nos cuenta.

De manera directa por la fundación han pasado más de 200 niñas, pero el eco de esta labor social ha impactado a comunidades enteras, porque también capacitan a padres y madres de familia, a líderes comunitarios, y visitan los colegios. Y no menos importante: las niñas de Talitha Qum son multiplicadoras del mensaje contra la violencia sexual en sus calles y en sus barrios.

“En el abuso sexual no hay nada a cambio, mientras que en la explotación sexual abusan de los niños a cambio de plata o algún juguete o celular. En la trata de personas, además, el victimario traslada a la víctima hasta otro lugar donde es vendida”, lo relata con seguridad Melani María Herrera López, de 15 años, quien cursa décimo grado, y asiste a la fundación desde los 9 años.

Como parte de los talleres, ellas levantan la cartografía de sus barrios con los puntos seguros y las zonas peligrosas. En estos mapas los puntos seguros están demarcados con color verde. El color amarillo es para las zonas donde posiblemente hay riesgo para ellas; y el color rojo, como en los bailes de picó, las tabernas o donde habitan agresores identificados, demarca los lugares peligrosos para las niñas.

El día que el Papa Francisco bendijo a Talitha Qum

Blanca Nubia López y el Papa Francisco

Blanca Nubia López y el Papa Francisco

Pero el momento más simbólico para esta esta obra, el día que Blanca Nubia supo que el de arriba la había escuchado y que iba por buen camino se dio en septiembre del año 2017, cuando el papa Francisco escogió a Talitha Qum, como uno de los programas sociales que serían bendecidos en su viaje apostólico a Colombia.

La mañana del 7 de septiembre de 2017 la plaza central del barrio San Francisco era un hervidero humano. Desde los árboles, los tejados o donde podían, la gente buscaba un lugar para presenciar al Santo Padre, que arribó cerca de la 9 de la mañana en el Papa Móvil.

Allí, sentadas en primera fila estaban Blanca Nubia y sus niñas, listas para recibir la bendición del representante de Dios en la tierra. A su lado estaban los jóvenes recicladores del programa María Revive otro de los proyectos insignes de la arquidiócesis, que también recibió la bendición del Papa.

Pero el momento más emotivo de aquella mañana soleada en Cartagena, fue cuando Blanca Nubia subió al atrio y fue recibida por el mismo papa, frente a sus niñas y a toda la comunidad.

“El Santo me tomó la mano, me miro a los ojos y me dijo no tengas miedo, no estás sola”, recuerda ella, mientras mira la foto de aquel instante eterno, la cual reposa en su oficina, ubicada en la casa que tiene el programa en el barrio La María.

Más de 200 niñas empoderadas contra la violencia sexual

Hemos encontrado en el teatro y el musical una herramienta para que las niñas reconozcan las violencias y peligros que las rodean y lo expresen

Para Blanca Nubia, su mayor logro es saber que sus niñas están empoderadas y capacitadas para capacitar a otros niños y prevenirlos de violaciones.

“Esto es a otro nivel, las niñas son capaces de activar rutas de atención, ellas saben que si un niño o una niña está en riesgo, ellas pueden inmediatamente llamar al 141 de bienestar familiar o al 122 de la Fiscalía General, o también llamar al 123 de la Policía Nacional. Ellas lo saben y son agentes multiplicadoras en su colegio, en su casa, en el entorno social más cercano”, explica.

En cada una de las sedes del programa atienden a más de 35 niñas porque buscan una formación personaliza en prevención contra la violencia sexual: en La Candelaria trabajan en prevención al abuso sexual; en La María, en prevención a la trata de personas; y en San Francisco están fortaleciendo la prevención a la explotación sexual comercial de niños, niños y adolescentes.

El arte como vehículo para exorcizar el dolor

Talitha Qum y Blanca Nubia López

Blanca Nubia López y Talitha Qum

Foto:

John Montaño/ EL TIEMPO

“Hemos encontrado en el teatro y el musical una herramienta para que las niñas reconozcan las violencias y peligros que las rodean y lo expresen. El talento lo tienen de sobra” señala la profesora de artes Lizbeth Caraballo, quien hace parte del equipo profesional de Talitha Qum conformado además por sicólogas, trabajadoras sociales, administradoras de empresas, entre otras profesionales.

Todas las tardes, las niñas crean y ensayan obras de teatro y musicales, que no son otra cosa que cuadros que representan la violencia sexual que ven en sus barrios, pero a la vez representan las herramientas que tienen para protegerse y denunciar.

“En los musicales llevamos un mensaje de rechazo al abuso de las niñas, pero también le cantamos a los adultos para que no nos sigan violentando”, cuenta Yoryanis Paola Herazo, de 14 años y quien ingresó al programa desde los 9 años.

Su última creación es un musical a ritmo de reguetón, tomando como base una canción de Karol G y Shakira. Las niñas, Blanca Nubia, y todo el equipo, sueñan con que las dos cantantes escuchen esta versión y algún día la canten juntas y sean una sola voz con Talitha Qum contra la violencia sexual.

John Montaño
Corresponsal de EL TIEMPO
Cartagena

En X: @PilotodeCometas

Más noticias...

Read Entire Article