¿Crisis de agua potable de Santa Marta va para largo? Petro reconoce que no hay avances

El presidente Gustavo Petro ratificó este miércoles en Santa Marta que esa ciudad llegará a sus 500 años en 2025 sin tener acceso al agua potable en más de la mitad de sus barrios. 

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El mandatario nacional fue sincero con la ciudadanía al informarles que en la actualidad no hay una alternativa clara para resolver este problema crónico que históricamente han sufrido los habitantes de la segunda ciudad más antigua de América.

De todos modos, reconoció que Santa Marta, al igual que todo el país, requiere una atención especial en esta problemática de agua potable, y mencionó la posibilidad de comprometer vigencias futuras para destinar recursos a una gran solución estructural.

“Aún triplicando el presupuesto del agua en Santa Marta, solucionar este problema en Colombia nos tardaría un siglo (...) Por eso nos metimos en un problema, que es cambiar la matriz de vigencias futuras en los próximos 30 años, que toda está dedicada a autopistas 4g y que nosotros queremos que en esos 30 años se tenga los 100 billones de pesos que cuesta la solución del agua potable y de saneamiento ambiental de toda Colombia. Antes que la carretera, el agua", señaló el presidente.

Igualmente, sin dar tiempos ni definir la cantidad de recursos, dio una directriz a la ministra de Vivienda, Catalina Velasco Campuzano, para que trabaje en la formulación de un proyecto irreversible y progresivo para que Santa Marta no en un año, pero si a un mediano plazo comience a ver resuelto su déficit en el acueducto precario que posee.

Petro dice que diferencias políticas han impedido darle el agua a Santa Marta
El presidente llamó a la unidad en torno a la solución de este problema, asegurando que intereses y diferencias políticas han impedido un mayor avance. Mientras tanto, aseguró que los privados, a través del negocio de los carrotanques, son los más beneficiados con esta crisis.

Seguidamente, cedió la palabra a la ministra de Vivienda, Velasco, quien también aceptó que, a pesar de llevar 22 meses estudiando el proyecto más viable para la capital del Magdalena, no se ha logrado mucho, incluso en comparación con Quibdó, que sufre del mismo problema y aunque apenas comenzó a trabajar en una solución en enero, ya tiene un plan estructurado.

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“Es la ciudad a la que más energía le hemos puesto y yo venía hoy pensando que me siento frustrada porque ya hemos estado durante 22 meses dándole vueltas y vueltas a los escenarios técnicos, a los escenarios financieros, a las diferentes alternativas, y no veía un camino”, indicó la funcionaria nacional.

Sobre las causas para no avanzar, dijo la ministra de Vivienda que es precisamente debido al debate democrático de la ciudad, el cual calificó de "vibrante".

No obstante, se mostró en la misma línea del presidente en el sentido de que es necesario unir a Santa Marta en torno al agua potable, que es la mayor necesidad de los hogares.

Lo dicho por el presidente y la ministra respecto a las diferencias políticas que existen en la ciudad en torno al problema del agua quedó en evidencia en este evento, donde el gobernador de Magdalena, Rafael Martínez, aprovechó su intervención para criticar la manera en que Carlos Pinedo se convirtió en alcalde de Santa Marta y cuestionar sus propuestas de agua diferentes a las que dejó su antecesora, la alcaldesa Virna Johnson.

Al mismo tiempo que se realizaba este encuentro entre el presidente, los mandatarios y la comunidad, en la calle 30, una avenida principal de Santa Marta, un grupo de habitantes bloqueaba la vía exigiendo que les suministraran agua.

De esta visita del Presidente Gustavo Petro a la ciudad no quedó nada consolidado, sin embargo, la comunidad clama que tal como se anunció, al menos se de inicio a un trabajo en conjunto entre la nación y el gobierno local para acabar con un padecimiento que parece no tener fin.