Quienes disfrutan de la pesca recreativa saben que necesitan tener paciencia y esperar por una buena presa. Sin embargo, dos pescadores experimentados no se imaginaban que iban a necesitar de toda su destreza para controlar a un animal de más de media tonelada de peso, todo sucedió en una playa de los Cayos de Florida.
Blaine Kenny es el dueño de Coastal Worldwide, una compañía con sede en Pensacola, Florida, que se especializa en la pesca y en experiencias centradas en ese deporte. Él y su socio, Dylan Wier crean el ambiente para que los turistas puedan capturar alguna presa marina.
Pero el pasado 31 de enero se sorprendieron con lo que pudieron atrapar pues, mientras se encontraban en aguas de Navarre Beach, un área en la isla de Santa Rosa, entre Destin y Pensacola, el anzuelo de Kenny atrapó una enorme ejemplar que los sorprendió
A las 8 A. M. de pronto su caña de pescar se tensó y comenzaron a tratar de atrapar lo que estaba en el anzuelo. Sin embargo, la tarea no fue nada fácil y durante ese transcurso se dieron cuenta de que lo que estaba en el agua era realmente grande, según compartieron los propios protagonistas en su canal de YouTube.
Pronto se dieron cuenta de que se trataba de un tiburón blanco. La presa era tan grande que la batalla tardó prácticamente una hora. De hecho, el experto en pesca ya se encontraba cansado, ya que le fue imposible controlar al animal por completo. Para documentar la hazaña utilizaron un dron.
Vale la pena aclarar que los pescadores no sacaron al ejemplar, el cual calculaban que tenía un peso de más de 544 kilos o 1.200 libras. Lo que hicieron fue alejarlo de la costa y llevarlo a aguas más profundas. Entonces Wier se lanzó al mar con herramientas para quitarle el anzuelo sin hacerle daño y dejarlo libre. Al respecto, los pescadores comentaron que se trata de un acontecimiento que ocurre muy pocas veces y que probablemente nunca volverán a poder atrapar un tiburón de esa magnitud.
Un gran día de pesca en Florida
Además del tiburón de más de 544 kilos de peso, el anzuelo de Kenny también atrapó un atún aleta amarilla con un peso de más de 36 kilos, por lo que sin duda se trató de un gran día para pescar.
Aunque cabe decir que, tal como documentaron en su canal de YouTube, para lograr conseguir a sus presas tuvieron que tener paciencia. Una noche antes ambos habían preparado todo su equipo en la playa y simplemente se sentaron a esperar mientras el sol empezaba a salir en Florida, un estado bien conocido por todas las especies que alberga.